Durante el paso de su gira “Who’s That Girl Tour” por Inglaterra, Madonna se dio tiempo para festejar su cumpleaños n° 29. El lugar escogido fue el famoso “Groucho Club” en Londres en donde gran cantidad de amigos y miembros del equipo de la gira se reunieron con Madonna para celebrar su cumpleaños. Entre los invitados contamos con John Hert, Lady Helen Windson (hija del Duque de Kent y prima de la Reina Elizabteh II) y el cantante Boy George. Por supuesto amigos de Madonna como el fotógrafo Herb Ritts y el director James Foley, con quienes la cantante llegó a su fiesta, su productor musical Patrick Leonard y la inseparable Debi Mazar, tampoco no podían faltar. Para destacar, el gran ausente de la noche fue su marido Sean Penn, el que se encontraba cumpliendo su condena en prisión en California.
El siguiente segmento corresponde a la nota titulada “El Diario de la Señora Penn” que apareció en la edición de septiembre de 1987 de la revista “N°01 – UK”. En la misma, Madonna nos relata como pasó el día de su cumpleaños número 29.
Domingo 16: ¡Es mi cumpleaños! Yippee! ¡Ya tengo 29 años! Me doy cuenta de esto y me deprimo. El maitre me trajo mi correspondencia la cual abrí en la cama. Sean me envió algo que hizo en la prisión. Espantosamente lindo. Es una chapa de patente “Mad 4 Penn”. Lloro un poco. Me alegro un poco cuando Clay me entrega su regalo. Una fotografía mía autografiada. Es tan tacaño. La Warner me regaló un dibujo hecho a lápiz de una chica desnuda tendida en un sofá de alguna artista francesa de los años 20. Espero que esto no sea una referencia indirecta a mi exposición en la revista “Penthouse” de este mes. Rodarían cabezas. Puedo salir a correr un par de vueltas al Mall seguida por una motocicletas. Aparentemente el Mall es un camino privado para la Reina y yo soy la única persona que puede ir por aquí.

Fiesta en mi honor. Es el “Groucho” en el Soho, West Central. Usé mi camiseta de seda negra y mis pantalones de matador haciendo juego y debo admitir que luzco impresionante. Hay un pequeño grupo de gente que me desea felicidades en las afueras del “Groucho Club”. Tienen un pastel de frutas para mí con una sola vela ¡Una sola vela!. Trato de componerme y digo un discurso de agradecimiento. Intento decir: “Gracias a todos por venir para desearme felicidades. Es una nueva etapa…” cuando todos comienzan a gritar y a aplaudir me di por vencida. “Gracias a todos por venir a desearme felicidades. Hay un nuevo disco de Erasure por salir, pero ¿a quién le importa?”. Arruiné mi broma completamente. Me agrada ver que Paula Yates ha teñido de nuevo su cabello color castaño. Las rubias se divierten más pero con una sola en el lugar es suficiente…¿Entienden?
Otros invitados estuvieron más o menos. Los Pet Shop Boys llegaron junto a Boy George, que raro. Bailaron un poco y luego se fueron a Brown con John Reid, el manager de Elton John. ¿Un dueto? No lo creo. Deberían llamarse “rubias”. Regreso a mi hotel temprano para tener mi hermoso sueño. No es que lo necesite. Pequeña broma. Sean me ha dejado un mensaje en la habitación. Lo llamó pero el Director de la prisión me dijo que no puede ser molestado. Leo un poco de mi nuevo libro de Jackie Collins y logro dormirme.
Una invitada especial fue la pequeña Jessie de tres años y medio, hija de Patrick Leonard. Jessie (quien daría nombre luego a la canción “Dear Jessie”) se mostró muy cercana a Madonna, quienes bailaron sin parar durante horas. Esto es lo que Patrick Leonard recuerda: “Madonna y Jessie han sido amigas desde que Jessie nació. Madonna es casi su madrina. Ellas juegan y bailan. De hecho, en Londres, en la fiesta de cumpleaños de Madonna, ellas bailaron juntas sin parar por casi dos horas. Madonna le dió de beber champagne. ¡Casi la mato!…Creo que la frase ‘elefantes rosados y limonada’ de la canción ‘Dear Jessie’ es una mea culpa de Madonna por haber emborrachado a la niña aquella noche”.


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