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«XLVI SUPER BOWL HALFTIME SHOW»


MADONNA DEJO A TODOS BOQUIABIERTOS Y MARCÓ UN NUEVO RÉRCORD CON SU PRESENTACIÓN EN EL ENTRETIEMPO DEL SUPERBOWL.


05 FEBRERO 2012 – Indianapolis; USA

LOS PREPARATIVOS

Esta sería definitivamente una de las actuaciones del año y tal vez, una de las actuaciones de Madonna más icónicas y recordadas de su carrera. La presentación de la Reina del Pop en el show de entretiempo del XLVI del Super Bowl, marcó un hito en su carrera y quedó como una de las cinco mejores presentaciones de entretiempo en la historia del Super Bowl. Según se sabe, Madonna había sido solicitada para actuar en el entretiempo tanto en 1999 y 2001 en donde estaba programado que interpretara su hit «American Pie», sin embargo por diferentes motivos laborales, esto nunca pudo concretarse. Este ha sido uno de los conciertos más codiciados de la música pop estadounidense desde que el fallecido Michael Jackson actuó con un coro de 3.500 niños en 1993, y después de la polémica cuando Janet Jackson tuvo un problema con el infame «mal funcionamiento del vestuario» en 2004. «Actuar en el espectáculo de medio tiempo es el sueño de cualquier chica del Medio Oeste», dijo Madonna en la conferencia de prensa realizada dos días antes de su presentación. Madonna se instaló en Indianapolis cinco dias antes de su show para culminar todos los preparativos y realizar un ensayo general antes de la gran noche. Toda la ciudad estaba inundada de carteles y afiches promocionando la presencia de la cantante. El partido se realizó entre el campeón de la Conferencia Americana (AFC), New England Patriots, y el campeón de la Conferencia Nacional (NFC), New York Giants y fue la primera vez que el Super Bowl se jugó en .

Ya desde hacía al menos seis meses que se venía llevando a cabo una serie de negociaciones entre el equipo de Madonna y los organizadores del entretiempo del superbowl, un espectáculo que desde la historia del juego había sido sitio de presentación de las más grandes personalidades de la música. En 2012, llegó el turno a Madonna y por supuesto ella no estaba dispuesta a que su presentación quede como una más. Una vez finalizadas las tratativas, Madonna comenzó la pre-producción de su show el que incluiría colaboraciones con varios artistas. Recordemos que durante los ensayos para el Superbowl, Madonna se encontraba en pleno proceso de promoción de su film «W.E.» y finalizando la post-producción de su último disco de estudio, «MDNA», de manera que los meses entre diciembre de 2011 y febrero de 2012 fueron tal vez, unos de los más intensos.

El entretiempo del Superbowl se llevó a cabo en el «Lucas Oil Stadium» el 05 de febrero de 2012, consistió en un megashow deslumbrante de 12 minutos de duración que mostró gran cantidad de bailarines en escena, un escenario con efectos especiales de luces y proyecciones de pantallas y un recorrido por 4 de los hits más grandes de Madonna, los que fueron editados con una duración de 3 minutos cada uno; además de colaboraciones con M.I.A, Nikki Minaj, LMFAO y Cee Lo Green. El show tuvo una audiencia de casi 3 millones de espectadores más que el partido en sí y fue vista por 114,0 millones de espectadores, batiendo un récord de audiencia y siendo el más visto de toda la historia de Superbowl, que se convirtió en el programa de televisión más visto en la historia de Estados Unidos y en el partido con mayor audiencia en 26 años. El crítico de «Entertainment Weekly», Ken Tucker, estuvo de acuerdo y calificó la actuación de Madonna como «alegre, poco irónica, de corazón abierto… Tenía pleno control y estaba llena de generosidad hacia su enorme audiencia». Madonna se asoció con el coreógrafo Jamie King y el «Cirque du Soleil» de Canadá con el desafió de redimir la pésima actuación del año pasado de los «Black Eyed Peas» (cuya actuación futurista no logró impresionar a los espectadores ya molestos porque Christina Aguilera estropeó la letra del himno nacional de Estados Unidos).

El Super Bowl XLVI rompió todos los récords en Twitter cuando los fanáticos de todo el mundo enviaron más de 10,000 tweets por segundo durante el clímax de la máxima competición deportiva. Según las estadísticas oficiales publicadas por Twitter, la mayor cantidad de tweets por segundo se produjo al final del final de la temporada de la NFL, con un récord de 12.233. En el brillante espectáculo de medio tiempo del Super Bowl de Madonna se envió un promedio de 8.000 tweets por segundo durante cinco minutos, aunque alcanzó un máximo de 10.245.


EL SHOW

El show del mediotiempo abrió con la presencia en el campo de juego de cientos de musculosos gladiadores (todos voluntarios locales) vestidos de oro y con lanzas marchando hacia el escenario, todos tiran un impresionante carro con un trono con reminiscencias egipcias en donde Madonna se presenta como una emperatriz romana al mejor estilo Cleopatra, lanzando las primeras poses cuando los acordes del hit «Vogue» (1990) inunda el estadio. Llegada al escenario, Madonna y todo el grupo de bailarines (que más tarde la acompañarían en su gira mundial «The MDNA Tour») ataviados con trajes con detalles de dioses romanos realizan una intrincada coreografía dándo una versión más fresca y moderna del típico «voguing». El segmento de «Vogue» un remix que más tarde se volvería a usar en versión completa en la gira, dura 3 minutos e incluye el primer verso, el estribillo y el famoso rap con los nombres de las celebridades. En el piso del escenario, se proyectan imágenes fragmentadas de algunas de dichas celebridades y fotos con el estilo de la famosa revista de moda. La gran Ana Wintour se pronunció al respecto luego de ver la actuación: “Estamos emocionados y muy agradecidos con Madonna por haber sido parte de una actuación tan espectacular. Naturalmente, esperamos un nuevo público de aficionados al fútbol».

Luego el show pasó inmediatamente al modo hip-hop, sacando a relucir bailarines de breakdance con ropa deportiva blanca para interpretar «Music» (2000). Durante unos segundos, Madonna parece trastabillar en uno de los escalones y casi pierde el equilibrio, aunque el momento fue sorteado con gracia sin pasar a mayores. Aparece entonces un equlibrista del «Cirque Du Soleil» quien realiza acrobracias sobre una cuerda. Para el promedio de la canción, se le unen el dúo electro LMFAO que intercaló su éxito de «Sexy and I Know It» y «Party Rock Anthem» (2011); este segmento duró otros 3 minutos para dar inicio a la proxima canción.

Ingresan al escenario un grupo de 20 bailarinas vestidas como porristas vestidas con bodys con flecos blanco y rojo mientras comienza la introducción del recientemente lanzado single «Give Me All Your Luvin». Por dos plataformas laterales del escenario suben la reina del rap Nicki Minaj y la irreverente M.I.A. quienes se unieron a Madonna quien ya jugaba con pompones unos dorados. Durante su actuación, M.I.A. (cuyo nombre real es Mathangi ‘Maya’ Arulpragasam) movió el dedo medio hacia la cámara mientras cantaba una palabra de cuatro letras que forma parte de la letra original de la canción. La imagen en la pantalla luego cambió brevemente, sugiriendo que la cadena de televisión NBC, la emisora ​​oficial del Super Bowl de este año, fue tomada por sorpresa. «Pedimos disculpas por el gesto inapropiado que se transmitió durante el entretiempo», dijo el portavoz de NBC, Christopher McCloskey. «Fue un gesto espontáneo que nuestro sistema de retraso detectó tarde». Al parecer, este gesto no fue del agrado de Madonna, quien ya había prometido dar un show «familiar» y sin subidas de tono. M.I.A. fue luego multada por U$S 16.6 millones por lo que ella tuvo que pedir disculpas públicas, incluso a Madonna (aparentemente, un arreglo secreto, consiguió que la rapera no pagara su multa).

Para el final, ingresa al escenario una banda musical completa de casi 50 integrantes comandadas por el rapero Cee Lo Green quien al ritmo de los tambores, interpreta junto a Madonna frases de «Open Yout Heart» y «Express Yourself» para luego dar inicio al éxito «Like A Prayer» (1989). Las luces se apagan y un gran coro de gospel vestido de negro y con el estadio iluminado con miles de luces diminutas, interpretan la canción; concluyendo con las palabras «paz mundial» en contraste con la oscuridad de el campo para que al final, Madonna desaparezca en una nube de humo.


EL ESCENARIO

Para el escenario, se contrató a «Torrence All Access Staging and Productions», con sede en California. Erik Eastland fue quien supervisó la instalación y había estado asociado con los premios Grammy y los premios Daytime Emmy. Se contrató a 1.500 miembros para su armado, de los cuales el 70 por ciento de los trabajadores eran voluntarios que se sometieron a seis meses de evaluación. El escenario principal tenía 36,6 m (120 pies) de largo y era modular, ensamblado en segmentos a partir de seis camiones grandes y debía ser ensamblado y desarmado en menos de cinco minutos para el correcto desempeño del show y del partido. El equipo también instaló los equipos de iluminación, video, efectos especiales y audio.

El escenógrafo Bruce Rodgers, que había trabajado con Madonna en la gira «The Drowned World Tour» en 2001, estaba familiarizado con la ética de trabajo de la cantante. Rodgers, el director Hamish Hamilton y el productor ejecutivo Ricky Kirshner se reunieron varias veces con el equipo de Madonna, representado por el coreógrafo Jamie King (quien presentó el concepto inicial del espectáculo). Rodgers desarrolló un gran escenario en forma de cruz con una plataforma central accesible mediante cinco ascensores ocultos, gradas con un sistema de escape en la parte trasera, cuatro posiciones para que tocara la banda, un área para slackline en un borde y rampas en los dos extremos. Los accesorios incluyeron un trono de pan de oro diseñado por Jimmie Martin sobre una barcaza transportada por 150 gladiadores. Los mayores desafíos de Rodgers fueron subir la barcaza al escenario y ensayar la procesión.

Las proyecciones y videos reproducidos con un sistema de maping y 32 proyectores HD fueron desarrollados por «Moment Factory»; los conceptos principales del show incluyeron las portadas cambiantes de las revistas para «Vogue», la procesión de inspiración egipcia, boomboxes «intergalácticos» durante «Music» y un efecto que hizo que el escenario pareciera absorber la hierba y la tiza del campo de fútbol. Algunas imágenes se sincronizaron con los bailarines y los movimientos de Madonna. Un total de 10 a 12 personas trabajaron en el proyecto para crear, en esencia, dos espectáculos: uno para los que estaban en el estadio y otro para la audiencia televisiva.


EL VESTUARIO

Madonna ingresó con un carruaje estilo egipcio con banderas y gigantescas plumas. Se diseñó un logo especial para el show y en la parte posterior del trono forrado enteramente con tela dorada se leía «MDNA» el título del nuevo disco que sería lanzado más adelante

150 jovenes musculosos, voluntarios locales se postularon para formar parte de la gran trouppe de gladiadores que tirararían el carro con el trono que llevaría a Madonna al centro del campo de juego y 20 bailarinas acompañarían a Madonna para hacer de porristas.

Un grupo de 12 bailarines principales acompañaron a Madonna, entre los que se encontraban el novio de la cantante, Brahim Zaibat y la amiga de Madonna, Sofia Boutella. Todos ellos la seguirían luego durante su gira «The MDNA Tour».


EL VESTUARIO

Para el estilo del show, Madonna trabajó en colaboración con le estilista B.Akerlund quien trabajó por más de 3 meses en las obras de vestuario y accesorios contratando firmas com «Givenchi», «Miu Miu» para las botas y «Bulgari» para la joyería. «Este fue, con diferencia, el mayor desafío que he asumido en mi carrera, y no podría sentirme más honrado de ser parte de un evento tan sorprendente e histórico», dice B. Akerlund. «Nada podría acercarse a trabajar con Madonna en esta actuación del Super Bowl; su atención al detalle y compromiso con todos sus proyectos es verdaderamente inspirador y cambia la vida». La presentación constó de 500 atuendos, incluidos looks de pies a cabeza para los invitados sorpresa LMFAO, Nicki Minaj, M.I.A. y Cee Lo Green, así como vestuario para 100 artistas de tambores, 150 gladiadores y 200 cantantes de coro.

El vestuario de Madonna estuvo a cargo del diseñador Ricardo Tisci para la casa «Givenchi» quien incorpó referencias distintivas como atrevidos estampados de leopardo, adornos tridimensionales, ubicaciones gráficas y cortes evocadores. Riccardo Tisci declaró: «Después de mi colaboración con Madonna en su última gira hace tres años, es un gran honor para mí ser parte de otro momento histórico e icónico. La gente dice que todo tiene un límite, pero los límites no existen con Madonna. Estoy muy feliz de que, después de estar ocupada en otras escenas, haya decidido volver a un escenario musical. No sólo para traernos música, sino también para hacer una declaración de rendimiento y moda». Para el inicio del show, Madonna lució una capa dorada bordada a mano con piezas recortadas de metal dorado, tachuelas, cristales, lentejuelas y paillettes, forrada en gasa con estampado de leopardo. También se completó el look con un tocado tipo corona de metal dorado bordado a mano con cristales y guantes largos de napa en color negro bordados a mano.

Minivestido negro de cady de seda, combinado con una capa corta con estampado de leopardo en charmeuse de seda bordada a mano con piezas recortadas de metal dorado, tachuelas, cristales, lentejuelas y lentejuelas y un cinturón de pitón negro bordado y tachonado a mano con solapas extraíbles a juego.

Abrigo negro tipo túnica de cady de seda bordado a mano con lentejuelas rectangulares negras brillantes y microperlas.


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