INFORMES: «MADONNA DOESN’T PREACH»

En la actualidad, Madonna nos tiene acostumbrados a la polémica. Desde sus inicios fue un personaje que le gustaba coquetear con límites y romper las barreras y tabúes sociales. Si bien sus primeros trabajos musicales no se desarrollaban en un ámbito político ni manejaban un mensaje directo sobre algún tema en particular, era su imagen la que causaba revuelo. Usar ropa interior llamativa y estridente, maquillaje cargado y sobre todo rosarios y crucifijos como accesorios de moda, era demasiado para la conservadora sociedad americana de los 80s, especialmente viniendo de una joven de Detroit y que encima llevase el nombre de “Madonna”. Los años pasarían y esta cantante, sin pelos en la lengua y ningún tipo de tapujos, se sacaría toda la ropa para publicar un libro de fotografías eróticas en 1992 llegando al punto máximo del escándalo. Sin embargo, un tiempo antes, una de las primeras grandes polémicas comenzaron a sobrevolar la carrera de Madonna. En 1986 se lanza “Papa don’t Preach”, una canción que habla sobre una adolescente embarazada y su decisión de tener a su hijo. Tal vez hoy, este tema no escandaliza demasiado pero para aquel momento si fue causa de un profundo análisis social.

La canción se convirtió en un éxito inmediato y la voz de Madonna estaba en todas las emisoras de radio permanentemente. Alguien alertó “muchas chicas están quedando embarazadas. No me gusta el mensaje”. Pero al menos tiene un buen ritmo. Mientras la popularidad de la canción se incrementaba, lo hacía también la polémica y la sociedad quedó automáticamente dividida en dos bandos bien marcados: aquellos que estaban en contra del embarazo adolescente y las relaciones pre-maritales y por otro lado, aquellos que estaban en contra del aborto. Los primeros acusaban a Madonna de fomentar el embarazo juvenil, mientras que los segundos, exaltaban el mensaje de “pro-vida” de la canción.

Alfred Moran, Director de “Planned Parenthood” (“Paternidad Programada”) de la ciudad de New York declaró que “el mensaje de la canción es que quedarse embarazada está bien, es cool y tener el bebé es lo correcto y no escuchar el consejo de los padres, de la escuela y de cualquiera que diga lo contrario. No me des sermones papá. La verdad es que Madonna está sugiriendo a las jóvenes que sigan un camino incorrecto hacia la completa pobreza”. Por otro lado, los grupos que se oponen al aborto apoyaron a Madonna y resaltaron el mensaje positivo y de vida de la canción. Susan McMillan, Presidente de “California chapter of Feminists for Life in America” expresó: “el aborto esta disponible en cada rincón para las jóvenes. Lo que Madonna les está diciendo es que hay otra alternativa”. Pero Alfred Moran recuerda de cómo tan sólo el año anterior, en 1985 su clínica se llenó de jovencitas que usaban guantes de encaje y rosarios como collares en un intento de querer ser como Madonna. “Toda la gente con que hablo piensa que ella tiene más influencia en las jóvenes que cualquier otros artista desde los Beatles. Y es por eso que esta canción sea tan destructiva” expresó. Moran junto a otros integrantes de los grupos de planificación familiar, temen que la canción debilite sus esfuerzos para promover el control natal entre los jóvenes y que los aliente hacia el embarazo. Más de un millón de adolescentes americanas quedan embarazadas por año, según el Alan Guttmacher Institute, una organización nacional de investigación. Para esto, una campaña para desalentar el embarazo adolescente se lanzó en la ciudad de New York en septiembre de 1986 desde la “Oficina de Servicios Parentales y Embarazo Adolescente”. Afiches y posters en las calles y anuncios de radio y televisión llevaron el mensaje “Sé inteligente con el Sexo” y el rapero L.L Cool J. grabó para las radios un tema titulado “Smart Sex Rap”. “Estamos usando el mismo medio para expresar un mensaje muy diferentes sobre ser inteligente con respecto al sexo y evitar el embarazo en las jóvenes. Lo que dice la canción de Madonna nos involucra” dijo Alice Radosh, Coordinadora de la Campaña. Alfred Moran también envió a las radios y canales de televisión un “memo crítico” en el que pedía “pensar seriamente sobre transmitir esta canción hacia la audiencia joven”; así también solicitó a la Warner Records, que donara el 25% de las ganancias de la canción a programas que ayuden a promover el comportamiento sexual responsable en los adolescentes.

En el otro extremo, Susan McMillan ha expresado que las jóvenes han reaccionado positivamente a la canción de Madonna. Se les ha transmitido el video a una audiencia de adolescentes y la respuesta fue favorable; según comentó: “había chicas de 14, 15, 16 años que estaban viviendo momentos muy duros con sus familias y sus novios. El hecho de saber que alguien como Madonna estuviera de su lado y les dijera ‘vamos tú puedes’ fue muy alentador”. Paradojicamente, Tipper Gore, fundadora del “Parents Music Resource Center”, un grupo que hace un año atrás intentaba censurar canciones que tuvieran un contenido sexual o violento y que ya había criticado e intentado censurar a Madonna por temas como “Like a Virgin” o “Dress You Up”, esta vez salió en defensa de la cantante, y habló a favor de “Papa don’t Preach”: “para mí, la canción habla de un tema serio con un sentido de urgencia y sensibilidad tanto en las letras como en la interpretación de Madonna. También se refiere al hecho de que debería haber más apoyo y comunicación en las familias con este problema, lo cual aplaudo. Esta es una canción importante y una buena canción que abre la discusión sobre una situación que cientos de jóvenes están enfrentando”.

Gloria Allred abogada perteneciente a un grupo feminista expresó luego de oír la canción que Madonna debería “o hacer una declaración pública sobre temas en donde los jóvenes no tienen opción, como el aborto; o sino tiene la responsabilidad de hacer otra canción que apoye el punto de vista opuesto al tema. Esta canción me preocupa mucho porque está siendo usada por los grupos anti-aborto para alentar a las jóvenes a continuar con los embarazos y mantener sus bebés en lugar de practicarse un aborto. Deberíamos alentar a las jóvenes que están en crisis con sus embarazos a discutir con sus padres cuales son las otras opciones posibles. Pero esta canción pone a la figura de los padres en un lugar muy negativo. Las canciones pop tienen un enorme impacto en los chicos hoy en día. Ellos captan los mensajes de la música mucho más de lo que pudieran captar en la escuela o en Iglesia. Se volvió como un mensaje religioso, forma parte de su sistema de creencias”.

Pero ¿qué dicen los verdaderos protagonistas de esta polémica?. El autor de la canción, Brian Elliot ha dicho que “no tuvo ninguna ambición de adoptar ningún interés de algún grupo en particular. No soy un activista y no llevo ninguna bandera. Sólo quise hacer que esta chica de la canción sea un personaje querible. Como padre, me gustaría tener acceso a los problemas de mis hijos”. Por otro lado, Madonna ha elegido en su momento, no hacer demasiadas declaraciones al respecto; su vocera oficial, Liz Rosenberg dijo: “Madonna sólo está cantando una canción no haciendo una declaración. Su filosofía es que cualquiera puede pensar lo que quisiera”.

Datos extraídos de entrevistas de “New York Times” por Gerogia Dullea y de “Entertainent News” por Patrick Goldstein de septiembre de 1986.