Durante su estadía en la Universidad de Michigan en Ann Arbor, Madonna posó para varios estudiantes de fotografías entre ellos sus amigos Peter Kentes y Linda Alanis. También lo hizo para otra joven llamada Cecil I. Taylor. Las imágenes fueron tomadas en el «Art World Institute of Creative Arts» de Ann Arbor y tienen la particularidad de mostrar a una muy joven y delgada Madonna completamente desnuda. Taylor tomó tres sets de Madonna haciendo poses de ballet, ataviada con sus mallas y zapatillas para luego ir dejándola al desnudo. En dos de estos sets podemos ver que Madonna luce el cabello muy corto, coincidiendo con la imagen que tenía durante las fotografías de desnudos tomadas por Hernán Kulkens. En otro de los sets, la joven luce el cabello largo, ondulado y oscuro, con un estilo muy parecido a las fotos tomadas por Linda Alanis; probablemente, estas imagenes fueron tomadas primero, antes de que Madonna decidiera cortarse el cabello.
Los sets de Taylor vieron la luz pública por primera vez en noviembre de 2017 cuando la casa de subastas «Gotta Have it Rock and Roll» las puso a la venta con un precio de inicio que rondaba entre los U$S800 y U$S1200. El lote consta de 108 fotografías en blanco y negro cada una acompañada de su correspondiente negativo y una nota de autorización de Madonna para realizar las imágenes fechada el 19 de mayo de 1977. Probablemente las fotos fueron vendidas a la casa de subasta por la curadora de arte Darlen Lutz, ex amiga de Madonna durante los 90s quien poseería varios artículos personales de la cantante. Fue ella misma quien entregó a «Gotta Have it Rock and Roll» otros elementos para subastar como cartas de Madonna al cantante Tupac o al actor John Enos, con quienes la cantante habría tenido una relación en durante la década del 90. Madonna intentó legalmente prohibir la venta de algunos de estos artículos.
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