En diciembre de 2010, Isabella Rossellini dio una entrevista a la revista «OUT», realizada por Noah Michelson. Allí habló de varios temas como su situación actual de trabajo y sus proyectos en el cine, sin embargo, hubo una pregunta que no pareció gustarle demasiado a la actriz y fue cuando se le preguntó sobre su colaboración con Madonna para el libro «Sex». Rossellini comentó que no le gustó la actitud de la cantante y el mensaje que quiso dar con el libro, como un mensaje de libertad obligada y hasta de insinuación de soberbia por parte de Madonna. Recalcó el trabajo de Meisel como fotógrafo destacando la calidad de las fotografías pero cuando el periodista le pregunta sobre se experiencia con el libro, esto fue lo que contestó:
«Yo estaba trabajando con el fotógrafo Steven Meisel. No conocía a Madonna y en ese momento, Madonna estaba trabajando con Steven en un libro sobre sexo. Y claro, el sexo es muy interesante. Incluso para mí, que estaba haciendo mis propios pequeños films de como tenían sexo los animales. Es muy interesante el sexo. Y Steven estaba tentado, en lugar de hacer un libro con fotos del estilo de revista ‘Vogue’ o como las fotos de su pasado, él quería hacer algo más desafiante. Así que pensé que tenía razón. El sexo es interesante, pero no creo que el libro haya funcionado, por más que las fotos eran extraordinarias y algunas de ellas memorables. Pienso que había algo de un poco ‘moralista’ algo así como ‘yo te voy a enseñar a ser libre’ y eso me aburrió muchísimo. Porque creo que si quieres practicar la abstinencia sexual y eso te hace feliz, está bien. Si quieres ser gay, está bien. Si quieres acostarte con todo aquello que se mueva, está bien. Es gracioso usar la palabra ‘moralista’ para ese libro porque la gente no los pondría juntos pero había algo de ‘yo sé más que tú’ y eso no me gustó».
Más tarde, en 2016, a casi 22 años del lanzamiento del libro y con Rossellini de 62 años, el periodista Ryan Buxton para el sitio de noticias HuffPost Live volvió a entrevistarla y el tema no pudo ser evitado, recordando aquella primera entrevista en donde la actriz había sido demasiado crítica con Madonna y el libro, llamándolo ‘moralista’ de alguna manera. Esta vez Rossellini, quiso ser un poco más amigable con sus declaraciones diciendo:
«Estaba encantada de poder trabajar con Meisel y con Madonna porque ella es una mujer muy interesante. Quise formar parte del proyecto apenas me lo pidieron. Cuando ves a una mujer empresaria, o a mí, una mujer mayor, desnuda, hay una cierta vulnerabilidad y creo que el libro superó eso. Madonna era casi demasiado hermosa, demasiado perfecta, demasiado en forma para mostrar esa vulnerabilidad o esa sensación de impacto que una mujer normal, regular no tan profesional y con un cuerpo tan trabajado podría mostrar».
DIVINA MADONNA 
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